MONOPOLIO EN EXTINSIÓN
Por: Ivan Gárate.
¿Qué hizo mi querida ciudad para
que soporte este mal endémico del transporte urbano? Para saberlo me remontaré
en el tiempo y hacer una retrospectiva del servicio de transporte de pasajeros
en nuestra ciudad.
Se conoce que por el año 1909 la
compañía Bolivian Power Co. introdujo el Tranvía que fue el primer medio de
transporte masivo que circuló en la ciudad. En ese entonces cuando aun
circulaban por la ciudad carretas tiradas por caballos, los habitantes eran ordenados
y aceptaron rápidamente el cambio de costumbres y se adaptaron fácilmente al nuevo
sistema de transporte moderno de ese tiempo y de manera ordenada los usuarios
esperaban en las paradas fijas con que contaba el nuevo sistema de transporte.
El tranvía funcionó hasta el año 1950, los registros indican que ya había
congestionamiento y el tranvía vino a ser un conflicto para el creciente parque
automotor en una ciudad con calles estrechas, en fin, lo cierto es que esa
compañía retiró de circulación los tranvías después de casi 40 años de
servicio.
Lo intrigante es que el primer
sindicato de colectiveros para transporte público se fundó por el año 1945,
cinco años antes de que el tranvía fuera retirado. Este nuevo sistema de
transporte introdujo unos buses que se conocieron como colectivos con una sola
puerta para entrada y salida de pasajeros. Ahí ya se notó el primer paso hacia un
retroceso y creo posterior a eso introdujeron otros buses con dos puertas una de
entrada y otra de salida pero luego clausuraron la puerta trasera y se volvió a
usar buses con una sola puerta. Esta situación hace notar que el ministerio
respectivo no se preocupó jamás de normar el sistema de transporte como
comúnmente lo hacían en otros países vecinos, por tanto el servicio sindicalizado
de transporte de pasajeros se fue degradando hasta niveles insospechados que
hoy en día nuestras ciudades se ven perjudicadas por la falta de criterio tanto
de las autoridades como de los dirigentes sindicales del transporte. Cabe hacer
notar que la empresa privada que manejó el sistema de tranvía tenia un criterio
visionario de lo que es un transporte de pasajeros, pero los sindicatos sin una
pisca de criterio sobre transporte masivo de pasajeros iniciaron el caos dando
comodidad extrema al pasajero con tal de hacer del transporte más un lucro que
un buen servicio.
No tengo el dato preciso, pero allá
por el año 1966, empresarios visionarios crearon el Sistema de Transporte Supra
Float con buses diseñados bajo normas internacionales para transporte urbano y masivo
de pasajeros. Los conductores eran gente culta, un servicio de calidad, paradas
fijas, puertas para entrada y salida de pasajeros, horarios de servicio entre
otros. Lamentablemente no duró mucho tiempo y esta empresa desapareció por circunstancias
que hoy en día se me hacen hasta sospechosas de que haya existido un complot de
algún lado pues discutieron entre socios y asesinaron al gerente y la empresa
se cerró para alegría de los sindicatos. Imagínense que por los años 60 ya
había en nuestra ciudad un transporte moderno y ahora en pleno siglo 21 con
tanto avance tecnológico tenemos un transporte urbano tan absurdo y mediocre.
Por lo que sucedió posteriormente
se nota que los sindicatos de choferes siempre buscaron beneficiarse de la coyuntura
política y aprovechándose de su condición de sindicato presionaron a gobiernos
dictatoriales para obtener prebendas políticas. Es así que a inicios de la
década de los 70s inician otro retroceso que en vez de implementar un
transporte moderno y masivo tienen el ingenio de reducir el tamaño de los buses
y con la venia del gobierno dictatorial de Banzer, del cual obtuvieron arancel
cero a cambio de apoyar al dictador para importar desde el Brasil un parque
automotor y ponen en circulación los micros con una sola puerta y con el
convenio de transportar cómodamente a 21 pasajeros sentados y máximo 5 parados,
sin paradas fijas, sin normas y sin el mínimo criterio. Inicialmente la población recibió con agrado
este sistema de transporte pero conforme pasó el tiempo salieron a flote los
problemas, la ciudad pedía a gritos un mejor transporte ya que los famosos
micros fueron desplazando a los buses o colectivos, que al no renovar su parque
automotor fueron desapareciendo. El convenio de la comodidad se fue yendo a la
alcantarilla, por no decir otra cosa, y se convirtieron en latas de sardina
hasta el día de hoy que aún circulan algunas líneas de micros.
Mientras vivíamos tiempos compulsivos
pasando de golpe de estado en golpe de estado los sindicatos se beneficiaban
apoyando a cuanto gobierno militar golpista aparecía, a tal punto que un
dirigente máximo de los transportistas, el tristemente célebre Antelo, en plena
plaza Murillo en una concentración de masas en apoyo al nuevo gobierno golpista
le pidió al dictador García Meza que le diera la medida de sus pantalones por
que creyó que era maravilloso el golpe de estado genocida que había propiciado.
Nuevamente los sindicatos tenían el visto bueno para hacer lo que se les venga
en gana con el transporte de pasajeros, claro está aparte de recibir regalos de
llantas y repuestos departe del gobierno genocida. Por estas actitudes,
posteriormente, la central obrera boliviana expulsó de su filas a este gremio.
Los sindicatos jamás apoyaron a
un gobierno democrático pues no les era conveniente por que les pondrían freno
a sus desmanes y a su monopolio, y como claro ejemplo está el boicot que
hicieron al gobierno de Hernán Siles para debilitar su gobierno con paros de
transporte consecutivos para de esta manera procurar otro golpe de estado. Al
no ser escuchados, retiraron su parque automotor de circulación y dejaron a
toda la población boliviana sin transporte durante 14 días. Es así que el
gobierno de la UDP crea la Empresa Nacional de Transporte Automotor, ENTA, y decreta
el transporte libre. Craso error, pues todo ciudadano que tenía una movilidad
apta para transportar pasajeros, lo hacia; y ninguna autoridad tuvo el criterio de regular este tipo de
transporte. Cualquiera podía hacer libremente este servicio y es así que
ingresan como medio de transporte los minibuses, nuestra mayor pesadilla hasta
el día de hoy. Si ENTA hubiera sido bien administrada, ahora nuestro transporte
sería diferente, pero lamentablemente los miristas corruptos administraron ENTA
e hicieron su botín y lo dejaron en la quiebra total, siendo que estos buses
nunca circulaban vacios. Luego de semejante debacle, el estado transfiere la
ENTA al municipio y por la corrupción e incapacidad de administrar la EMTA cede
su administración a los sindicatos de choferes (http://www.la-razon.com/opinion/columnistas/Dictadura-ruedas_0_2070992905.html);
y como para estos era algo desconocido tal como pasar de almorzar en los
agachados a un restaurante cinco estrellas, entonces logran la quiebra total de
la EMTA y continúan con su absurdo sistema de transporte convencional que
habían creado.
El transporte libre con sus
minibuses paliaron la necesidad de transporte de la población. Los sindicatos,
después de sus 14 días de paro y no conseguir mas que el gobierno les dé un
reverendo revés, tuvieron que volver con la cola entre las piernas a hacer el servicio y empezaron a introducir
minibuses a sus filas, otro retroceso en el progreso. Imagínense que de los
colectivos pasaron a los micros y luego a los minibuses y para colmo de males
nos introdujeron los carrys, y creo que si no fuera por el frio que tenemos en
nuestra ciudad nos hubieran encajado también moto taxis.
Ahora en estos días y viendo que la protesta de la población se va
haciendo cada vez más generalizada y esta a punto de explotar un conflicto
mayúsculo entre los sindicatos y la población, y como ya no tienen gobiernos
dictatoriales a quien apoyar y recibir prebendas, ahora quieren meterse a la
política y uno de los máximos dirigentes esta en tratativas con el gobierno del
MAS para que lo postulen como asambleísta. Su temor es que mediante esta
asamblea se puede lograr leyes para normar el transporte y siendo asambleista,
él pueda frenar cualquier proyecto de ley que perjudique a su gremio, pues en
estos momentos debido al mal servicio se dan cuenta que el sindicato de
transporte es una lacra y ya existen propuestas de que los sindicatos deben
desaparecer y crear empresas privadas o publicas de transporte de pasajeros
como está sucediendo con el Puma Katari y el Teleférico, solo falta que
capitales privados empiecen a crear empresas de transporte y sería el epitafio
para los sindicatos, ojalá.
La lógica de creerse fuerza de
estos sindicateros es que creen tener poder por el hecho de estar agrupados en
gremios no pensantes, pero lo que no se dan cuenta es que el real poder se los
da precisamente el usuario de su aberrante sistema de transporte. Y la lógica
del usuario es que por cada chofer de minibús, existen 14 usuarios; por cada
chofer de carry, existen 7 usuarios; por cada chofer de micro, existen 30
usuarios; por cada chofer de bus, existen 45 usuarios y por cada chofer de
trufi, existen 5 usuarios. Dato referencial suponiendo que los usuarios
viajaran de parada a parada, por tanto por cada chofer de transporte somos más
que ellos y si somos mayoría deberíamos analizar un plan de boicot para no usar
su transporte por solo un día y demostrarles quienes somos y quien es el que
tiene la sartén por mango.
En resumen, los sindicatos
siempre apoyaron a gobiernos dictatoriales y presionaron a gobiernos
democráticos para mantener su monopolio en el transporte y son un lastre para el desarrollo y el progreso,
por tanto deben desaparecer aunque el representante de este nocivo sector ya
haya sido nominado para senador en la asamblea. Aunque esta postulación ya es
irreversible, nosotros los usuarios tenemos la sartén por el mango y podemos exigir que se presente como
uninominal o se arriesgue al rechazo con el voto castigo al partido político
que lo postuló.
Con tan solo 63 buses Puma Katari
en circulación, a los choferes ya les tembló la rodilla. Con solo el anuncio de
importar otros 70 buses más, ya se mearon de susto y son una especie en
extinción con su monopolio. Imaginemos
que se ponga en circulación unos 500 buses Puma Katari, los haríamos
desaparecer del mapa para siempre a este sector que solo ha velado por sus
intereses en desmedro de los paceños. La Alcaldía debería planificar este hecho
lo antes posible e inclusive ver la posibilidad de vender acciones si es que el
presupuesto es el impedimento.
¡LA
PAZ, CUNA DE VALIENTES Y TUMBA DE TIRANOS!
Iván Gárate.